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La gestión de lo importante. La Matriz de Eisenhower
ATODOR | M.A. La importancia de cuidar la experiencia del candidato
La experiencia de un candidato en un proceso de selección está llena de altibajos. Desde la ilusión y las ganas de encontrar un nuevo desafío, hasta la incertidumbre y la espera por una respuesta, cada paso deja una huella emocional que puede fortalecer o afectar su percepción sobre la empresa.
Quiero compartir algunas ideas desde el corazón y desde nuestra experiencia en TalentPink. Porque, al final del día, en cada proceso de selección no solo estamos evaluando habilidades, sino también dejando una impresión duradera.
Sabemos qué prácticas funcionan: ser transparentes, respetar los tiempos y ofrecer un feedback sincero y útil. Pero también reconocemos que, en ocasiones, la falta de comunicación o la distancia emocional pueden hacer que el candidato crea que no es valorado, que su esfuerzo no fue importante, y eso duele.
En TalentPink aplicamos cinco principios que nos ayuden a hacer de la experiencia del candidato algo positivo y humano:
- Hablar con claridad: Desde el primer contacto, ser honestos sobre cómo será el proceso, los tiempos y las expectativas. La transparencia genera confianza y tranquilidad.
- Acompañar con cercanía: No solo buscamos llenar un puesto, buscamos ofrecer un camino. Queremos que cada candidato sienta que no está solo, que recibe una guía respetuosa y amable en cada paso.
- Dar feedback con cuidado: Cuando no somos la opción, el feedback debe ser una oportunidad para crecer. Detallado, respetuoso y constructivo, para que el candidato pueda mejorar y seguir adelante.
- Mantener la objetividad: Cada persona tiene un talento único. Evaluamos con justicia, sin prejuicios, con la intención genuina de valorar habilidades y potenciales.
- Escuchar y entender: Cada candidato trae su historia, sus contextos y sus sueños. Personalizar la comunicación y mostrar empatía no solo es profesional, es esencial.
Pie de foto | AUTORLas 'Power Skills': son el verdadero ritmo del éxito
En el mundo laboral, las Power Skills tienen algo especial: no son algo que se enseñe fácilmente en un curso o se adquiera con una certificación. Son habilidades que cada persona trae consigo, moldeadas por su experiencia, sus valores y sus vivencias.
Medir las características humanas no es universal ni estático; se adapta a cada persona y sus circunstancias. Lo que significa compromiso, liderazgo o resiliencia varía de un individuo a otro y se mide según su propio contexto y retos.
¿Cómo trabajamos estas habilidades? Cuando hablamos de desarrollo en el trabajo, solemos pensar en lo técnico: aprender Excel, construir un edificio o dominar una herramienta. Pero, ¿qué ocurre con ser un mejor comunicador, colaborar efectivamente o manejar el estrés? Estas habilidades requieren algo más profundo: autoconocimiento y un enfoque personalizado.
Una analogía que uso con los equipos es esta: piensa en lo más complicado que has enfrentado esta semana. Ahora compáralo con lo más difícil que has vivido en tu vida. Ese momento se convierte en tu "10" personal. Si comparas ambos, quizá lo complicado de esta semana ya no parezca tan grande. Como líder, mi deber es trabajar sobre el "10" de cada persona, no el mío. Porque quien actúa, toma decisiones y lidia con los retos es esa persona, no yo. Este enfoque humano y personalizado marca la diferencia.
La clave del éxito: tu ritmo, tu poder. El ejemplo perfecto de las Power Skills lo veo en mi hijo, quien siempre me dice: “Mamá, tu deprisa no es mi deprisa”. Aunque yo camine rápido con mis pasos cortos, él se adapta a mi ritmo, porque lo importante no es la velocidad, sino avanzar juntos.
En el trabajo sucede lo mismo. Cada uno tiene su propio ritmo y sus propios retos. La verdadera Power Skill está en reconocerlos, adaptarnos y encontrar el equilibrio que nos permita avanzar como equipo, respetando las particularidades de cada uno.
Pie de foto | AUTOR¿La valoración es objetiva?
- 𝙎í, 𝙩𝙤𝙙𝙤 𝙪𝙣 𝙚𝙟𝙚𝙢𝙥𝙡𝙤 𝙙𝙚 𝙩𝙧𝙖𝙣𝙨𝙥𝙖𝙧𝙚𝙣𝙘𝙞𝙖 𝙮 𝙟𝙪𝙨𝙩𝙞𝙘𝙞𝙖.
- (Aunque sigo esperando el momento en que me seleccionen para Hogwarts).
- 𝙈𝙖𝙨 𝙤 𝙢𝙚𝙣𝙤𝙨, 𝙥𝙚𝙧𝙤 𝙨𝙞𝙚𝙢𝙥𝙧𝙚 𝙝𝙖𝙮 𝙚𝙨𝙥𝙖𝙘𝙞𝙤 𝙥𝙖𝙧𝙖 𝙢𝙚𝙟𝙤𝙧𝙖𝙧.
- (Como mi capacidad para recordar contraseñas).
- 𝙉𝙤, 𝙛𝙪𝙚 𝙘𝙤𝙢𝙤 𝙪𝙣 𝙚𝙥𝙞𝙨𝙤𝙙𝙞𝙤 𝙙𝙚 '𝙅𝙪𝙚𝙜𝙤 𝙙𝙚 𝙏𝙧𝙤𝙣𝙤𝙨'.
- (Intrigas, sorpresas... pero sin dragones).
- 𝙉𝙤 𝙡𝙤 𝙨𝙚, 𝙥𝙚𝙧𝙤 𝙮𝙖 𝙨𝙤𝙮 𝙚𝙭𝙥𝙚𝙧𝙩𝙤 𝙚𝙣 𝙚𝙨𝙥𝙚𝙧𝙖𝙧 𝙘𝙤𝙧𝙧𝙚𝙤𝙨 𝙙𝙚 '𝙡𝙖𝙢𝙚𝙣𝙩𝙖𝙢𝙤𝙨 𝙞𝙣𝙛𝙤𝙧𝙢𝙖𝙧𝙩𝙚'.
- (Mejor suerte para la próxima, ¿no?
NDANKO